viernes, 25 de junio de 2010

Las raíces del tiempo


Nocturno silencio. Huele a otoño y a nostalgia amarga. ¡Cuánto pesan los sueños solo sueños! Años y años condenado a creer que el brillo de la vida nos espera tras los altozanos del tiempo. Y cuando llega ese instante -¡tanto tiempo somos ya!, ¡tan desvalido es nuestro ser!-, solo añoramos -oh, dicha suprema- los cándidos días lejanos, aquellos en que nuestro deseo era pura luz.

Huye el tiempo y solo nos queda respirar la eternidad de cada instante, de este instante, sin duda, en que sobre mí gravita lo que nunca seré, pese a todos los sueños.

[Publicado en la revista Cuadernos del Matemático, 2001]

viernes, 18 de junio de 2010

Las nieves de antaño



De la infancia recuerdo
la eternidad del día,
la constancia del río
y la palabra íntegra
(álamo, yunque, trigo),
la magia tenebrosa
del cine, el esplendor
gozoso de la nieve
y una emoción sin nombre
que huele a paraíso.


[Publicado en la revista Cuadernos del Matemático, 2001]

viernes, 11 de junio de 2010

Volúbilis


El sol mordía la piel. El silencio
y las extrañas ruinas evocaban
misterios.
                      El corazón buscó
en la ciudad soñada el agua de los días.
Mas la melancolía, ciega y triste,
amordazó las ruinas y el silencio.

[De Cuaderno de sombras, 2001]